Haiga

haiga. Automóvil de aspecto muy lujoso. En los 60, las únicas personas que podían comprarse un cochazo eran los nuevos ricos que, cuando llegaban al concesionario, pedían el coche más grande que "haiga".

En 1960 había pocos "haigas" en Zaragoza. Y pocos ailantos. El automovil era un signo de progreso y los proyectos de decoración de Antonio Ruiz Asensio solían incluir un cohe de lujo delante del establecimiento del cliente, para dar nivel.
Eduardo Laborda ha recuperado los originales de estas perspectivas para la exposición "Zaragoza años sesenta" que se podrá visitar hasta el 27 de septiembre de 2010 en el Palacio de Montemuzo, en Ailanthus Zity. Con su aquiescencia, he fotografiado cada uno de los vehículos aparcados en estas entrañables cartulinas. Lo he hecho, como acostumbro, con la pequeña Lumix, sin flash ni trípode. Con tembloroso pulso ante un trabajo impecable, sin pretensiones pero con arte.
He colgado aquí un Álbum de Fotografías con 30 modelos, 30 haigas de Antonio Ruiz Asensio.