Sin querer

No era mi intención. Ni hoy, ni ayer, cuando fotografié los libros de fotografía. No era mi intención, pero se plantaron ahí delante. Igual que esta mañana, cuando he ido a ver la incipiente crecida del Ebro. Pájaros. Pájaros mentirosos y pájaros ruidosos. Querían salir, pues ¡hala!